Vídeos Habana cimarrona

miércoles, 11 de septiembre de 2019

¿Es Cuba una escuela de “delincuentes”?


¿“Inventar” no es delinquir en la Cuba castrista?
¿Cuál es la diferencia en Cuba entre una persona “delincuente” y otra que no lo es? Sabemos que la inmensa mayoría de cubanos desde hace sesenta años sobrevive de la bolsa negra, mercado negro o subterráneo y surge la pregunta, ¿quien no ha comprado una lata de sardina, un par de zapatos, un  bleu jeans o pitusa de mezclilla, un pedazo de carne de res, un paquete de camarones, un pulover, una bolsa de cemento, ladrillos, herramientas o un galón de combustible? Deténgase a pensar si lo ha hecho o no. Y la verdad que no me imagino a nadie, absolutamente nadie incluyéndome cuando vivía en Cuba, que no haya participado aunque sea en un cambaleche de ese tipo. Pues sepa que al hacerlo, usted y yo estuvimos (y están) “violando las leyes” que lo prohíben todo en esa dictadura castrista, en un país donde la población lleva 60 años delinquiendo en ese mercado negro. No mencionemos la policía corrupta (esa policía que es más animal que los propios perros que utiliza) y esa militancia comunista “delincuencia autorizada” donde ninguno está exento y se cree lo más puro de ese sistema putrefacto. Entonces, ¿qué diferencia hay entre el que roba o sustrae un producto de cualquier establecimiento estatal y el que lo compra sentado en un sillón de su casa, o de un escritorio a otro en un centro de trabajo o estudio, o en una esquina del barrio? Desgraciadamente, esa dictadura Castro comunista es una fábrica de “delincuentes” sin mencionar su cúpula dirigente, que ha saqueado
un país que fue considerado entre los más rico de América.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario