Vídeos Habana cimarrona

jueves, 19 de septiembre de 2019

Intentando descifrar el discurso del Luis Alberto García con sus propias palabras.


El actor Luis Alberto García llega en avión a Miami, pero sus mensajes no llegan a las 45 millas.
Hay quienes le han enviado cartas, mensajes, respuestas como el laureado director de cine Lilo Vilaplana y no les contesta, voy a evitarme tal omisión y trataré de descifrar el discurso encriptado, que posteó en su muro de Facebook. Lo del “período espacial” me queda claro que abarcará mas allá de 60 años, mientras existan los timoratos como Díaz Canel, que no logra poner los pies en tierra. Al referirte “a los menos” también me queda clarísimo al indicar la élite dictatorial castrista. Todos sabemos que “esos menos” llevan sesenta años (60), sin ellos padecerlo, burlándose del hambre, la sed y los apagones que los atacarán como los Caminantes Blancos, de la falta de más medicinas, los sudores y sofocos sin ventiladores ni aires acondicionados en este verano eterno, las horas que cientos de miles verán consumirse en las paradas de ómnibus, los taxis en “stop motion”, y no quieren de verdad lo mejor para ustedes. Son 60 años justificando los medios, pareciéndoles bien que los ancianos y los niños sufran en un primerísimo primer plano, al igual que los enfermos encamados, los que deben ir a un hospital por una diálisis, un suero para paliar el cáncer o una sesión de fisioterapia y pasarán las de Caín para transportarse, los que necesitan un trasplante y no tendrán acceso a los medicamentos que les permitan a sus cuerpos acoger a ese nuevo órgano sin rechazarlo, ¿merecen ese vía crucis? Claro que no, Luis Alberto. ¿Tú crees que ellos en 60 años no lo saben? ¿Se lo vienes a enseñar tú, ahora? ¿En defensa de qué idea apoyan semejante indefensión?, te preguntas. Bueno, que yo sepa en los “ideales de su socialismo”. Claro que sí, Luis Alberto, claro que los hace felices pensar en los cientos de miles de compatriotas, familiares, amigos o conocidos, que estarán dos o tres horas tratando de ir a trabajar para mantener a los suyos y otras dos o tres para llegar a sus casas para cocinar lo que aparezca, a veces sin agua, a veces sin energía eléctrica, en un ciclo infernal. Si, no solo felices sino contentos de que miles de emprendedores pierdan lo que invirtieron, recuerda Luis Alberto que a ellos nunca les interesó la propiedad privada. No, tu ves, en eso no están contentos, más bien están preocupados por la desaparición de los cruceros y merma de las remesas. ¿Se les dibuja en sus rostros una sonrisa imaginando semejante malvivir? Bueno, Luis Alberto cuando veo los hijos y nietos de esos “menos”, darse la vida que se dan en el “imperialismo” o capitalismo, en lo primero que me doy cuenta es en sus caras sonrientes, llenas de gozo y deleite al disfrutar del despilfarro al erario público. ¿Alguna vez Luis Alberto, le preguntaste eso mismo que preguntas, a las madres que se quedaron sin hijos porque “esos menos” intervinieron militarmente en Angola y Etiopía, amén de los niños que nuestras bombas y metrallas mataron en esos países?, ¿Cristianos?. Tu bien sabes que ellos son ateos. ¿Buenas personas? Yo diría más bien, asesinos. Qué suerte la tuya Luis Alberto, que puedes venir acá al imperio a visitar tu hija y que cuando te veas cualquier madrugada de esas, con un pedazo de cartón, echándole fresco a tus hijitas durante horas para que puedan dormir y llegar a su escuela medianamente descansadas, vas a pensar mucho en nosotros. Yo también voy a pensar en ti y en tus niñas cada vez que me acuerde que van hacer 20 años, que “esos menos”, no me permitieron estar con las mías tan niñitas como las tuyas y nunca más las vi ni las he visto ni creo que las vuelva a ver. Y te doy las gracias Luis Alberto García, por incluirme en esos tres millones de cubanos desperdigados por el mundo, que a pesar de no gustarles el comunismo no piden lo peor para los que viven allá en Cuba.

Fuente: https://www.facebook.com/garcianovoaluisalberto

martes, 17 de septiembre de 2019

Aymée Nuviola con su “ingenuidad” agravia la memoria de Celia Cruz.


Interpretando una serie sobre la vida de Celia Cruz, fue que Aymée Nuviola se hizo famosa y ahora con “pasmosa ingenuidad” ultraja la memoria de la guarachera del mundo. Cuando Celia Cruz junto a la Sonora Matancera, la contrataron para trabajar en México el 15 de julio de 1960, el nuevo régimen cubano encabezado por el matonesco Fidel Castro, la borró del espectro musical cubano por “aceptar ofertas de trabajo en el extranjero”. No llevaba un mes en el país azteca, cuando murió su padre Simón Cruz. El 7 de abril de 1962 preparándose para actuar, recibe la noticia de la muerte de su mamá Catalina Alfonso la que había luchado contra un cáncer y el dictador cubano Fidel Castro le prohibió en varias ocasiones ver a la madre enferma. Anteriormente la “salsera” ya vivía en Nueva York, Estados Unidos, el mismo país en el que hoy vive Aymée Nuviola, radicada en Miami y donde el alcalde Regalado, también le regaló la “Llave de la ciudad”. Ahora Aymée Nuviola de visita en Cuba declara que "Hay personas a quienes les cuesta aceptar que no necesariamente porque viajes a Cuba quiere decir que estás apoyando un régimen, que estás apoyando un gobierno o que vas a meterte en política". Si estás apoyando al régimen, si estás apoyando a un gobierno como lo hace Gente de Zona, Decemer Bueno, el tal Micha, etc, etc, etc, y si te metes en política. A ese régimen le interesan tus dólares, a ese gobierno le importa que le rentes los estudios de la EGREM, y utilices sus radioemisoras estatales para “desprestigiar al exilio” y tú te prestas para ello. Solita te metes en política cuando haces dúos con la momia Omara Portuondo y la claria Chucho Valdés, ambos con las manos entintadas de sangre al firmar la carta de fusilamiento a tres jóvenes cubanos que intentaban huir de la dictadura castrista. ¿Acaso no te da sentimiento ver las fotos de la Guarachera del mundo, recoger un poquito de tierra del lado de acá de la cerca Naval de Guantánamo, porque ese régimen le prohibió de por vida pisar suelo cubano? Por lo menos avergüénzate cada vez que lleves a tu boca el nombre de Celia Cruz.

Fuente:
Wikipedia. CiberCuba. Y la página digital de Aymée Nuviola.

lunes, 16 de septiembre de 2019

Ideas retrógradas socialistas.


Miren este vídeo y te hago una pregunta ¿Crees que con estas ideas retrógradas se desarrolle el socialismo? Sigue poniendo la esperanza en el sistema socialista. Espéralo sentado.

domingo, 15 de septiembre de 2019

¿Por qué boicotear a Gente de Zona “si no son políticos”?


Todo en la dictadura castrista es política, ella prohibió a los Beatles en Cuba por diversionismo ideológico calificando a los jóvenes de “elvipreslianos” y metiéndolos en los campos de concentración de la UMAP, fue esa misma dictadura la que prohibió a José Feliciano, por declarar que estaba a favor de la guerra en Vietnam*, sin importar que su música era obligada para cualquier quinceañera, y en cada “fiesta” las perseguidoras detenían a los jóvenes que disentían. Julio Iglesias corrió con idéntica suerte por cantarle a la dictadura de Pinochet, al igual Camilo Sesto, quien murió recientemente. La dictadura fue la que obligó a la juventud de nuestro tiempo escuchar a escondidas, estos ídolos en plena fama, mucho más que la de Gente de Zona. Ella fue la que prohibió la música de Willy Chirino, Gloria Estefan, Meme Solís, Olga Guillot y Paquito D’ Rivera. La dictadura borró de la faz de Cuba a la inolvidable Celia Cruz, (en la foto recogiendo un puñado de tierra desde la Base de Guantánamo), cuando era la cubana más conocida en el mundo, pero en Cuba, muy pocos, para no ser absoluto, eran los que conocían su música y existencia. Ninguno de estos artistas cubanos era político, eso sí, exigían la libertad de Cuba en cualquier escenario del orbe. Y Gente de Zona con su actitud se burla del exilio, la “Llave de la ciudad de Miami”, baila junto al nieto de Raúl Castro y reconoce a Díaz Canel como su presidente, vive aquí en Miami y le hace el juego a la dictadura castrista que le prohibió en vida a la “guarachera” volver a pisar su tierra. Gente de Zona y quienes lo apoyan mancillan al exilio y la memoria de la cantante cubana más grande de todos los tiempos, Celia Cruz.

* Los motivos de las censuras fueron los que escuché mientras viví en Cuba.