La campaña del paro en enero del 2020 de no recargas, no remesas, no envíos, no viajes, promovida por Alexander Otaola en contra de la dictadura castrista, no obliga a nadie hacerlo, pero tampoco el presentador está equivocado en lo que convoca, porque hoy hace exactamente 124 años, cuando el general en jefe Máximo Gómez la había llevado a través de su tea incendiaria de una forma más drástica y radical acorde a su tiempo. No es por gusto que la dictadura se inquiete y de forma descomunal arremeta en contra del influencer, activando toda su maquinaria ‘’goebbelsiana’’ y apelando a los sentimientos como si le interesara un bledo el destino del pueblo. Ellos mejor que nadie saben las consecuencias. El generalísimo dominicano convocaba en aquel entonces. "Que no se haga zafra por ningún dinero (sigan mi consejo, sigan el dictamen del amigo más leal que Cuba puede tener) que las fuentes de donde el enemigo aún sueña con sacar recursos, se estanquen o se sequen. No hay que tener miedo a las quejas del mundo superficial y tonto. Los cubanos no buscamos, no queremos tener primero, más que honor, Patria y Libertad. Todo lo demás llega obligado y grande después de todo aquello. Lo que se necesita es triunfar, y los medios más eficaces y más resueltos, aunque parezcan duros, para llegar hasta allí, siempre serán los mejores, los más decorosos y aplaudidos. Lo malo, lo desgraciado, lo deshonroso es no triunfar, y lo malo, lo cruel y torpe, es dilatar el triunfo. Eso es no amar al País".(2)
(1) El cubano debe estar en la manigua; el extranjero que se lleve el
ingenio para su tierra.
(2) (Carta de Gómez a Estrada Palma, Remedios, 8 diciembre 1895,
Boletín del Archivo Nacional, t. XXII (1921), p. 223)