En los tiempos de la colonia, y también de la República, era muy común que algunos oficiales vivieran en las fortificaciones militares, y en ellas procrearan a sus hijos, tal es el caso de nuestro ilustre campeón mundial de ajedrez José Raúl Capablanca, que nació en el Castillo del Príncipe, en La Habana. También, el eminente escritor José Lezama Lima, quien lo hiciera en el cuartel de Columbia, y que con sus biografías nunca hubiera ni cuestionamientos ni dudas. Se me hace raro que el primer biógrafo del Apóstol, Gonzalo de Quesada y Miranda, hijo del discípulo del más universal de los cubanos, fuera quien pusiera en dudas de que el apóstol de nuestras libertades hubiera nacido en la casa de Paula, basándose en informaciones que le habían proporcionado la señora Cocola Fernández del Castillo y su esposo el señor Emilio D. Cassi, que aseguraban haber escuchado de los propios labios de don Mariano Martí y Navarro la noticia de que su hijo había nacido en el barracón siete de La Cabaña, y que fue pocos días después de haber nacido, que ellos se habían instalado en la casa Paula número 41.
Al constituirse la Asociación de damas José Martí, la señora Sara Prado, secretaria de correspondencia, se dirigió a varios conocidos martianos con consejos. Gonzalo de Quesada y Miranda insistió en que sería muy conveniente realizar una investigación a fondo que dilucidara, previamente, si José Martí había nacido en el barracón siete de la fortaleza de la Cabaña o en la casa de la calle de Paula número cuarenta y uno, más tarde 102, y en la actualidad calle Leonor Pérez número 214. Para ello tenía en cuenta la pretensión de la Asociación de Damas José Martí de consagrarse al cuidado y embellecimiento de la casa natal del Apóstol.
Ello trajo como consecuencias que la señora del Prado diese traslado al presidente de la Academia, en su sesión del 23 de noviembre de 1934, que designó una Comisión integrada por los académicos del Ejercito Libertador Joaquín Llaverías, Director de Archivo Nacional, Emilio Roig de Leuchesenring, Historiador de la Ciudad de la Habana, y Gonzalo de Quesada y Miranda, a fin de que realizaran la indagación solicitada. Los comisionados dirigieron comunicaciones, en demanda de datos esclarecedores, al señor Arturo R. Carricarte, en su carácter de director del Museo José Martí. La comisión luego de una ardua investigación, pero sin mostrar un documento oficial que probara tal hecho, determinó que nuestro Apóstol había nacido en la casa con el No. 41 de la calle Paula.
Bibliografía: Revista Bohemia. Año 45. No.5. La Habana. Febrero 1º de 1953.
