Autor: Ivo Basterrechea Sosa.
El
pargo, la cherna y el pájaro, fueron las palabras que representaron la
homofobia mambisa hacia los yucatecos y los campechanos que se alistaban como
voluntarios al ejercito español. El cubano por herencia española es calificado como machista y muy dado al choteo ofensivo. A modo de
entendimiento, la palabra manera, según el DRAE está en desuso, pero hacía
referencia a la abertura lateral en las sayas (entiéndase faldas) de las
mujeres, para que pudieran pasar las manos hasta alcanzar las faltriqueras, que
eran los bolsillos de las prendas de vestir a la altura de las caderas. Al
hombre que llevaba las manos a esa altura y las “partiera”, o no, le llamaban
amanerado, lo mismo sucede con el vocablo flojo, que en Cuba significa hombre
homosexual. La presencia de yucatecos y campechanos en la Habana, (Leer el
artículo sobre ellos) data desde 1564, y desde 1763 hasta el comienzo del siglo
XIX mantuvo dividida la ciudad en dos mitades: El barrio de la Punta o Catedral,
y el barrio de Campeche. La migración de yucatecos y campechanos hacia la Isla,
fue aumentando a través de los siglos, ya fuera en forma de esclavos,
prisioneros o colonos, dispersándose por toda la colonia, hasta la zona
oriental, donde por su número dieron nombre al poblado de Campechuela, diminutivo de Campeche, según Fernando Ortiz (y no,
por la existencia del palo campechano), hoy municipio de la provincia Granma. A
esos yucatecos, campechanos y a cualquier mexicano, la sociedad habanera los
llamó de forma despectiva, guachinangos (Leer el artículo sobre ellos). El
significado de la palabra guachinango, también estaba relacionada con el pez
pargo, al que el erudito Felipe Poey lo clasificara como“Campechanus
Poey”(1). Y lo mismo, con el pez cherna, dícese a la meretriz. (prostituta). Tiene la aceptación castellana, con que se
distingue el pez "mero", que en Cuba no se conoce por este nombre
(2). Existiendo una especie de cherna, la llamada cherna yucateca (3). Por lo que
en la Habana, aún en la actualidad se le dice pargo o cherna al homosexual. ¿Y
qué tienen que ver estos peces con la homoxesualidad? Pues de la palabra,
guachinango (yucatecos y campechanos), deriva el adjetivo, aguachinangado, que
según el Diccionario provincial casi-razonado de voces y frases cubanas, de
Esteban Pichardo, signicaba, amanerado
en costumbres, hechos o dichos a semejanza del Guachinango, por sus
ocurrencias, zalamerías, o modo de hablar contractivo y silboso, marcando
demasiado el sonido de la S y nunca la Z. O lo que es lo mismo
un tipo muy “fino”. El escritor habanero Antonio Bachiller, al
darnos a conocer una parte de su concepto guachinango, escribía, se llamaba así á los mexicanos en el
Departamento occidental: en el central parece que tuvo una significación más
bélica, pues se hablaba de haberse armado los veteranos, guachinangos y
voluntarios en cierta ocasión en Villa clara. Vale aclarar que el
alzamiento insurrecto de Carlos Manuel de Céspedes en 1868, en la Demajagua, fue
muy cerca de Campechuela, muy rodeada hasta 1898 por el regimiento de infantería
mambí de Vicana, vecinas y ambas pertenecientes al Departamento Oriental.
Sabemos que las palabras peyorativas del pargo y la cherna hacia los
guachinagos (yucatecos y campechanos) fueron más bien en la zona occidental, como
también la palabra cundango, que en parte de su significado don Fernando Ortiz,
acotaba... En Cuba se ha dado en llamar
también “pájaro”, “pajarito” al afeminado o “cundango”; dícese que por
influencia de la picaresca habla de los mejicanos (4). En el caso de los
que se alistaban en el Cuerpo de Voluntarios del ejercito español en
Campechuela, (esto me lo contó mi padre, al que se lo contó mi abuelo, que fue
coronel de los mambises) les llamaban de forma ofensiva a los campechanos “Capechuela el que no corre vuela” (5),
en alusión al pájaro, que según el DRAE, en algunos lugares de Cuba, es
sinónimo de sodomita, o sea homosexual. Así que homosexual no se le gritaba al
campechuelero cubano, sino al campechano que se alistaba o simpatizaba con
España.
(1) Diccionario provincial casi-razonado de voces y
frases cubanas, de Esteban Pichardo. Ediciones 1861 y 1875.
(2) Vocabulario Cubano. Suplemento a la I4. Edición
del Diccionario de la R. A. de la Lengua. Constantino Suárez (españolito).
1921.
(3)
Vocabulario Cubano. Suplemento a la I4. Edición del Diccionario de la R. A. de
la Lengua. Constantino Suárez (españolito). 1921
(4) Glosario de afronegrismos. Fernando Ortiz. Pág. 156
(5) Abelardo Basterrechea
(1856). En el libro del general Carlos Roloff en la página 90 con el título de
“Indice Alfabético del Ejército libertador de Cuba”, aparece que se incorporó a
la guerra de independencia el 1ro de Agosto de 1896 en el asiento 6796.
Departamento Oriental segundo cuerpo del ejército, 1ra división, 2da brigada del
regimiento infantería de Vicana. Grado: Capitán. Todo asentado en el libro 4to
folio 284 No 341 del Archivo Nacional. Nota: Grado para aclarar. Grado
aclarado: Coronel.