Ninguna avispa es débil y menos su toxicidad.

El crítico de cine Roberto Madrigal inserta en mi muro un enlace de su crítica al filme Wasp Nerwork, que publicó en la plataforma Cubaencuentro, y lo tomé como una invitación a leerla. Así lo hice, y me pareció estupenda desde el punto de vista literario.

Sólo que no comparto la “ingenuidad” (no de Madrigal) sino del título “La picada de la débil avispa”, porque ninguna avispa es débil y menos su picada, cualquier avispa por débil que sea cuando pica es tóxica, irrita y causa aflicción. Refiriéndose al director, Olivier Assayas al que considera “uno de los más importantes directores del cine contemporáneo” (no lo dudo), a Madrigal le resulta “difícil comprender cómo cayó en la trampa de escribir y dirigir Wasp Network”. Muy fácil, porque no hay avispa débil. Y casi al final de su crítica, Madrigal redondea “Los que no saben mucho del asunto, la audiencia aleatoria, no va a entender mucho y mayormente se aburrirá con la película”. Totalmente desacertado. Esa “audiencia aleatoria” a la que se refiere Madrigal, resulta ser la gran mayoría de cubanos, desinformada en la isla, y su volumen aumenta con los “despistados extranjeros”, y los “cubanos malnacidos” que aplauden y apoyan desde afuera y no la viven. Si ese gran director e intelectual francés Olivier Assayas, que Wikipedia lo tiene como “activista comunista” cayó en las redes del avispero, ¿qué puedes esperar de esa desinformada “audiencia aleatoria” que la dictadura en su vara de pescar, y en vez de una zanahoria cuelga un muslo de pollo como carnada, para traerla a su antojo de una “cola” o fila, para otra, las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana, y los 61 años de existencia, y luego  aplaude a las 9 de la noche? La película es tóxica en todo su concepto, desde que deja caer que dos de las avionetas “utilizadas para las drogas” la donaron Willy Chirino y Gloria Estefan, demostrando el “efecto” pertubador en la mente de un Alexander Delgado, (Gente de Zona), arrastrador de miles de jóvenes, no sabía quien era Willy en Miami. Y por último el bombazo, el estereotipo (mafioso y narco) de un Mas Canosa, imagen del exilio tradicional y fundador de la extinguida Fundación Nacional Cubano Americana, muy ligada a la Fundación Nacional por la Democracia, y esta a su vez con la disidencia actual cubana dentro de la isla, las mismas que la dictadura utiliza en sus redes manipuladoras para difamar, atacar y desprestigiar a sus líderes, como el caso más reciente de José Daniel Ferrer. Dejémonos de sandeces y pamplinas de la “ingenuidad democrática”, y si de verdad aman la democracia asómense por un momento a la ventana y con ojos verdaderamente críticos, convénzanse del peligro en que se encuentra a nivel mundial y así se darán cuenta de una vez y por todas, la toxicidad de la avispa por muy débil sea su apariencia.

Enlace.

La picada de la débil avispa.

No se dejen enredar.

Discrepo de quienes piden a gritos no censurar la película de la “Red avispa”. Los cubanos no vivimos en democracia, los que están adentro viven en dictadura, y por culpa de esa misma dictadura la mayoría de los que estamos afuera (opositores, disidentes, oportunistas, aprovechados, simpatizantes, “neutrales”, "malnacidos", etc, vivimos en distintas democracias ajenas, que la hagamos nuestra es otra cosa, pero no deja de ser ajena, o mejor dicho no es genuinamente cubana. Los que estamos en contra de la dictadura, solo tenemos como armas las ideas, y como escudo la información. Contra la dictadura, todo, censurar ese engendro, ese bodrio ideológico Wasp Netwok es quitar un arma al enemigo, como tan seguro estoy que tendremos bajas cuando la dictadura censure la película Plantados de Lilo Vilaplana. ¿Olvidan que esa dictadura asesina lleva más de sesenta años mintiendo, adoctrinando, censurando desde el primer punto y coma de una obra literaria hasta un manchón en un papel? ¿Ya olvidamos a Guillermo Cabrera Infante, a Virgilio Piñera, a Heberto Padilla, a Reinaldo Arenas y cientos y cientos de artistas e intelectuales, incluyendo a los reguetoneros? Aducen, que así sería en la democracia futura, primero eliminemos la dictadura y luego veremos. También, que atacamos el intercambio cultural, en uno de mis escritos lo comparé a “un caballo de Troya”. Un día alguien me preguntó porqué si antes del 59, el desarrollo económico era tan grande, el pueblo se lo dejó arrebatar. En aquel momento la respuesta sería tan larga que lo dejé pasar, y miren hoy, que tan breve sería: Por lo mismo que las democracias se tambalean ahora, cuando permitieron jugar con el avispero. No, a los panales. No, a las avispas. No se dejen enredar.